Esta es la historia del héroe pequeñito que resistió lo imposible y de los grandes héroes que no se rindieron hasta devolverlo a los brazos de su madre. Este bebé de dos semanas se salva después de que su hogar en Siria es bombardeado, gracias a los esfuerzos de un grupo de rescatistas voluntarios e imparciales de una organización llamada “Los Cascos Blancos”. Ellos trabajaron incansablemente por 12 horas para sacarlo de entre los escombros de lo que una vez fue su hogar. Khaled Farah, fue uno de los miembros del equipo de rescate y sus palabras, te paralizarán. Los bombardeos nunca paran así que ellos tampoco se detendrán, siempre van a continuar su lucha por lo más importante: LA VIDA. No te puedes perder el momento en que el bebé sale de esa tumba de escombros, ¡es como si volviera a nacer! Absolutamente conmovedor .
Fuente: www.viralistas.com